domingo, 3 de abril de 2011

Soneto

En un dia demasiado lluvioso,
voy hacia el colegio a contracorriente
con demasiadas cosas en la mente
y con el ánimo muy perezoso.

Hacer clase resulta empalagoso,
pero asisto irremediablemente,
espero en la entreda con mas gente
cuando se nos cruza un profesor soso.

Al entrar en clase saco el estuche,
lapiz y otros objetos para escribir
en una gran libreta color negro.

Damiá espera que alguien le escuche,
espera a que acabemos de dividir
y cuando al fin acabamos me alegro.